Según se puede leer en ElConfidencial, no se ha hecho esperar la reacción de los usuarios de la redes sociales ante el anuncio del ministro del interior, referente a la inminente tipificación como delito de integración en banda criminal, las convocatorias, a través de cualquier medio de comunicación, que den lugar a manifestaciones carácter violento .
Si bien es cierto que no es nada deseable ver imágenes como las que se pudieron observar en las manifestaciones de la pasada huelga general, tampoco se pueden utilizar como escusa, según mi punto de vista, para sesgar el derecho a la libertad de expresión, asociación...etc. De llegar a buen término esta propuesta del ministro del interior, esperemos que sea utilizada con racionalidad; desde luego yo, entre el extremo de las imágenes de Barcelona del pasado 29-M, cuyos efectos son, la quema de contenedores, rotura de escaparates de negocios, el deterioro del mobiliario urbano, y la mala imagen de nuestro país en el exterior; y el extremo de una sociedad con el derecho de libertad de expresión mermado (o directamente amputado, como en Corea del Norte), donde se de una alienación de la sociedad por sus mandatarios, me quedo con las "benditas" consecuencias de la primera opción.
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